Brasil se dejará llevar en los próximos cuatro días por la fiebre del carnaval, que desde la más famosa de las celebraciones en Rio de Janeiro hasta los populares carnavales callejeros de Salvador de Bahía, sacarán a las calles a millones de personas desbordantes de alegría.
"El carnaval en Brasil es una tradición. Nadie resiste las ganas de participar", resumió el presidente del Senado, José Sarney, para justificar la ausencia el miércoles de varios diputados y senadores en el Legislativo, cuando en realidad las festividades comienzan el viernes.
En Rio de Janeiro, el carnaval comenzará oficialmente cuando el ´rey momo´ dé inicio a las festividades pidiendo a los cariocas y a los miles de turistas que recorren la ciudad, que se dejen llevar por la alegría y la locura del carnaval más famoso del planeta.
Este año la fiesta tendrá una nota de fuerte emoción, ya que tres de las mayores "escolas de samba" que participan del desfile en el mítico sambódromo de Rio, perdieron todo en un incendio hace un mes y, aunque desfilarán, no serán puntuadas para el concurso de agrupaciones.
Serán dos noches de desfiles, el domingo y el lunes, con 12 escuelas participando cada una con entre 3.000 y 5.000 bailarines y carros alegóricos gigantescos, para tocar los temas más variados, que este año incluyen homenajes a músicos populares y a famosos como el cantautor Roberto Carlos.
La expectativa de las autoridades es que este año unos 760.000 turistas lleguen a Rio para el carnaval, 30% venidos del extranjero. Se prevé que la ciudad ingresará unos 560 millones de dólares durante esta fiesta popular.
Las calles de la ciudad están mucho más pobladas que de costumbre y el flujo de visitantes es notorio, para seguir esta tradición carnavalesca que es a la vez una manifestación de orgullo de las personas de menos recursos que trabajan todo el año para poder desfilar en sus escolas, y un negocio millonario.
Cada "escola" gasta entre dos y cinco millones de dólares para presentar su desfile, dinero que proviene en parte de fondos públicos, en parte de empresas privadas, y también de dirigentes de juegos clandestinos que apadrinan a las agrupaciones.
Aunque la fiesta comienza oficialmente el viernes, los días previos estuvieron marcados por multitudinarios desfiles callejeros.
En Salvador, en el nordestino estado de Bahía, comenzaron el jueves los siete días de fiesta corridos en los que cada año centenares de miles de personas recorren las calles bailando detrás de los "trios elétricos", enormes camiones con altoparlantes sobre los cuales cantan famosos de la música ´axé´.
La gran novedad del carnaval este año: el gigante de internet Google anunció que transmitirá en directo los principales eventos del carnaval bahiano a través de su sitio Youtube.
En Recife y su vecina Olinda, también en el noreste, un millón de personas bailarán al ritmo frenético del "frevo" siguiendo al grupo "Galo da Madrugada",, la mayor agrupación de carnaval de Brasil.
Es una época de fiesta, en la que la seguridad fue reforzada en todas las grandes ciudades y, como cada año, el gobierno prevé la distribución de 20 millones de preservativos para prevenir las enfermedades sexualmente transmisibles.
El miércoles, la alcaldía de Rio lanzó por primera vez la campaña "Rio: carnaval sin prejuicios", para luchar contra toda forma de discriminación sexual o racial, con puestos para asistentes sociales y pedagogos instalados en la turística zona sur de la ciudad.
AFP
"El carnaval en Brasil es una tradición. Nadie resiste las ganas de participar", resumió el presidente del Senado, José Sarney, para justificar la ausencia el miércoles de varios diputados y senadores en el Legislativo, cuando en realidad las festividades comienzan el viernes.
En Rio de Janeiro, el carnaval comenzará oficialmente cuando el ´rey momo´ dé inicio a las festividades pidiendo a los cariocas y a los miles de turistas que recorren la ciudad, que se dejen llevar por la alegría y la locura del carnaval más famoso del planeta.
Este año la fiesta tendrá una nota de fuerte emoción, ya que tres de las mayores "escolas de samba" que participan del desfile en el mítico sambódromo de Rio, perdieron todo en un incendio hace un mes y, aunque desfilarán, no serán puntuadas para el concurso de agrupaciones.
Serán dos noches de desfiles, el domingo y el lunes, con 12 escuelas participando cada una con entre 3.000 y 5.000 bailarines y carros alegóricos gigantescos, para tocar los temas más variados, que este año incluyen homenajes a músicos populares y a famosos como el cantautor Roberto Carlos.
La expectativa de las autoridades es que este año unos 760.000 turistas lleguen a Rio para el carnaval, 30% venidos del extranjero. Se prevé que la ciudad ingresará unos 560 millones de dólares durante esta fiesta popular.
Las calles de la ciudad están mucho más pobladas que de costumbre y el flujo de visitantes es notorio, para seguir esta tradición carnavalesca que es a la vez una manifestación de orgullo de las personas de menos recursos que trabajan todo el año para poder desfilar en sus escolas, y un negocio millonario.
Cada "escola" gasta entre dos y cinco millones de dólares para presentar su desfile, dinero que proviene en parte de fondos públicos, en parte de empresas privadas, y también de dirigentes de juegos clandestinos que apadrinan a las agrupaciones.
Aunque la fiesta comienza oficialmente el viernes, los días previos estuvieron marcados por multitudinarios desfiles callejeros.
En Salvador, en el nordestino estado de Bahía, comenzaron el jueves los siete días de fiesta corridos en los que cada año centenares de miles de personas recorren las calles bailando detrás de los "trios elétricos", enormes camiones con altoparlantes sobre los cuales cantan famosos de la música ´axé´.
La gran novedad del carnaval este año: el gigante de internet Google anunció que transmitirá en directo los principales eventos del carnaval bahiano a través de su sitio Youtube.
En Recife y su vecina Olinda, también en el noreste, un millón de personas bailarán al ritmo frenético del "frevo" siguiendo al grupo "Galo da Madrugada",, la mayor agrupación de carnaval de Brasil.
Es una época de fiesta, en la que la seguridad fue reforzada en todas las grandes ciudades y, como cada año, el gobierno prevé la distribución de 20 millones de preservativos para prevenir las enfermedades sexualmente transmisibles.
El miércoles, la alcaldía de Rio lanzó por primera vez la campaña "Rio: carnaval sin prejuicios", para luchar contra toda forma de discriminación sexual o racial, con puestos para asistentes sociales y pedagogos instalados en la turística zona sur de la ciudad.
AFP